Seguidores

14 de agosto de 2012

Todo trabajo tiene su recompensa



Cuando crezcas, ya te darás cuenta de que ya defendiste suficientes mentiras, te engañaste a ti mismo o sufriste por verdaderas tonterías. Si eres un buen guerrero, no te culparas por ello, pero jamás dejaras que tus errores se repitan. Los errores es algo inevitable, pero si te caes cien veces levántate ciento una. Que si decides hacer cosas mediocres al final tus resultados serán mediocres. El trabajo es la clave del éxito, o al menos eso dicen, pero por mucho que me esfuerzo no consigo que mis resultados tengan que ver con todo lo que doy. "Un día tus sueños dejarán de ser solo sueños".


10 de agosto de 2012

El árbol de los amigos


Existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino. Algunas recorren el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar, pero otras apenas vemos entre un paso y otro. A todas las llamamos amigos y hay muchas clases de ellos.

Tal vez cada hoja de un árbol caracteriza uno de nuestros amigos. El primero que nace del brote es nuestro amigo papá y nuestra amiga mamá, que nos muestra lo que es la vida.
Después vienen los amigos hermanos, con quienes dividimos nuestro espacio para que puedan florecer como nosotros.
Pasamos a conocer a toda la familia de hojas a quienes respetamos y deseamos el bien.

Pero el destino nos presenta a otros amigos, los cuales no sabíamos que irían a cruzarse en nuestro camino. A muchos de ellos los denominamos amigos del alma, de corazón.
Son sinceros, son verdaderos. Saben cuando no estamos bien, saben lo que nos hace
feliz.
Y a veces uno de esos amigos del alma estalla en nuestro corazón y entonces es llamado un amigo enamorado. Ese da brillo a nuestros ojos, música a nuestros labios, saltos a nuestros pies. Pero también hay de aquellos amigos por un tiempo, tal vez unas vacaciones o unos días o unas horas. Ellos acostumbran a colocar muchas sonrisas en nuestro rostro, durante el tiempo que estamos cerca.

Hablando de cerca, no podemos olvidar a amigos distantes, aquellos que están en la punta de las ramas y que cuando el viento sopla siempre aparecen entre una hoja y otra.

El tiempo pasa, el verano se va, el otoño se aproxima y perdemos algunas de nuestras hojas, algunas nacen en otro verano y otras permanecen por muchas estaciones. Pero lo que nos deja más felices es que las que cayeron continúan cerca, alimentando nuestra raíz con alegría. Son recuerdos de momentos maravillosos de cuando se cruzaron en nuestro camino.

Te deseo, hoja de mi árbol, paz, amor, salud, suerte y prosperidad. Simplemente porque cada persona que pasa en nuestra vida es única. Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros.
Habrá los que se llevarán mucho, pero no habrán de los que no nos dejarán nada. Esta es la mayor responsabilidad de nuestra vida y la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad.


9 de agosto de 2012

“El amor no falla nunca”




Después de 26 días llenos de idas y venidas, viajes largos y cortos, hacer y deshacer la maleta y, sobre todo, de días llenos de emociones me siento delante de un papel y un boli, dejando que sea el corazón quien dicte cada palabra…

No se muy bien como empezar. No se cómo expresarme. Más bien, no se lo que siento… He vivido muchas cosas en poco tiempo; me llena de alegría pensar en muchas de ellas pero me muero de miedo por revivir otras sin saber que me harán sentir esta vez. Tengo el corazón cargado de nuevos nombres, nombres que hacen que la piel se me ponga de gallina cada vez que los pienso, nombres que me han llegado directamente al corazón. A veces a parecen en tu vida persona que te llenan, que te dan una felicidad plena al ver su mirada llena de una felicidad inmensa a pesar de los miedos y las inseguridades que caminan con ellos. Esa mirada te hace darte cuenta de lo agradecida que debo estar por ser lo afortunada que soy, al tener la familia que tengo, mis amigos, el tener la oportunidad de vivir experiencias de este tipo que me hacen conocer a gente maravillosa

En este camino duro pero a la vez satisfactorio, porque te metes en una realidad que no sabias que existía pero que realmente esta mucho más cerca de ti de lo que pensabas, me ha acompañado gente… gente especial, que me ha hecho el camino mucho más fácil y seguro. Gente con la que he hablado y he abierto mi corazón de par en par sin miedo a lo que dijeran porque sabía que no me juzgarían. Con ellos he encontrado mi sitio, me he visto reflejada en sus miradas y acompañada en cada paso que he dado. Una conversación, un plan de vida compartido, inseguridades y miedos hablados, dudas propuestas… son componentes de algo que no se puede expresar con palabras. Un cariño surgido en pocos días. Un amor compartido a lo que nos une. Un abrazo. Secar las lágrimas en un momento de emoción. Una dura despedida. Un sentimiento compartido. Es algo que no tiene definición en un diccionario ni palabras para ser comprendido, es un amor correspondido.
"El hombre descubre la vida de su alma en la medida que se adentra en su interioridad" gracias a lo vivido, a toda esta gente que se me ha aparecido en el camino, me he adentrado un poco más en mi interior… desequilibrando todo aquello que parecía sólido, proponiéndome buscar respuestas y no dejar de hacerlo.

Gracias
Gracias por todo lo vivido juntos, por todos esos momentos que no se olvidan, que marcan. Por las miradas, por cada palabra de animo, por la acogida, por el cariño mostrado, por cada conversación… por todo aquello que sólo nosotros sabemos. Gracias. 

Marta. Rodrigo. Juncal. Maite. Bego. Borja. Ana. Itziar. Alba. Juan. Teresa. Vero. María. Inés. Patxi. Clara. Carlos.

“El amor no falla nunca”